Como la familia prometía ser numerosa iniciaron las reformas que
duraron bastante tiempo. Le agregaron a la casa muchas .
habitaciones alrededor de un patio que fue testigo silencioso de la
vida de los Arnaldi. Y las sospechas se hicieron realidad con la
prolifera suma de 14 hijos.
Soledad Rojo, bisnieta de doña Matilde y responsable de la
conservación de esta antigua casona decidió preservar de alguna
forma todos sus recuerdos.
Hoy, el antiguo comedor, con su araña original y la vieja pintura
decorada con stencil atesora lindísimas artesanías realizadas por
gente de nuestro pueblo y del interior del país. Bolsos bordados,
ponchos con increíbles diseños, artesanías en calabaza, utensilios
en palo santo.Todo realizado con diseños autóctonos.